Los datos de la inflación de agosto aceleraron el panorama alcista de la moneda extranjera.
Por REDACCION
- El INDEC confirmo que la inflación de agosto fue de 4,2%, mucho más de lo proyectado por el Banco Central.
- Los analistas de Aurum señalan que la tasa de devaluación promedio mensual ronda el 3,7%.
La economía argentina sigue experimentando una fuerte presión inflacionaria, lo que no solo afecta el poder adquisitivo de los ciudadanos, sino que también intensifica las expectativas sobre el tipo de cambio. El dato de inflación de agosto, que sorprendió al ubicarse en un 4,2%, provocó ajustes en los contratos de dólar futuro, con un impacto directo en las expectativas del mercado cambiario.
El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) confirmó que la inflación en agosto superó las expectativas, alcanzando un 4,2%, frente al 3,9% proyectado por el Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM) del Banco Central. Este incremento en los precios puso más presión sobre el dólar futuro y generó ajustes al alza en los contratos a lo largo de toda la curva.
Los contratos de dólar futuro para diciembre ya se ubican en torno a los $1.099, un claro reflejo de la preocupación del mercado por una aceleración en el tipo de cambio hacia fin de año. Expertos del sector como los analistas de Aurum señalan que la tasa de devaluación promedio mensual ronda el 3,7%, lo que deja a las coberturas cambiarias relativamente caras si no se produce un salto significativo en el tipo de cambio en los próximos meses.
Expectativas cambiarias y tasa de devaluación
A pesar de la continua intervención del Banco Central para mantener el esquema de «crawling peg» o microdevaluaciones diarias, las expectativas de una mayor aceleración del tipo de cambio hacia fin de año se intensificaron tras el último dato inflacionario. Según fuentes del mercado, el gobierno buscará evitar un ajuste brusco del tipo de cambio para contener la inflación, extendiendo el cepo cambiario y priorizando la estabilidad de los precios hasta bien entrado el 2025.
Sin embargo, los contratos de dólar futuro continúan en ascenso. Para octubre, alcanzarían los $1.017, y para noviembre, se espera que lleguen a los $1.055. A medida que nos acercamos a fin de año, diciembre se proyecta en $1.099, mientras que para febrero de 2025, el dólar podría alcanzar los $1.181 y para abril, $1.264.
¿Qué esperar en el corto plazo?
La reciente caída del dólar blue, que cerró la semana a la baja, no alivia las expectativas en torno al dólar futuro. De hecho, el mercado sigue mostrando cierta incertidumbre en el corto plazo, lo que impulsó la demanda de cobertura en los contratos de dólar futuro.
Los analistas de Outlier explican que la curva de futuros registró un aumento de más del 1% en algunos tramos medios, reflejando que los inversores prevén una mayor probabilidad de un ajuste cambiario antes de fin de año.
Por su parte, la demanda en el mercado de caución también mostró signos de aceleración, con tasas que alcanzaron el 60% TNA en algunos momentos, un indicativo más de que el mercado está ajustando sus expectativas en función de la evolución de la inflación y el tipo de cambio.
En este contexto, los inversores y empresas seguirán buscando protección frente a la volatilidad cambiaria, lo que mantendrá la demanda de contratos de dólar futuro en niveles elevados, especialmente si el panorama inflacionario no muestra signos de mejora en los próximos meses.