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Vaca Muerta impulsa la producción energética a máximos históricos en Argentina

El cambio fue significativo en agosto con un crecimiento de 14% para el petróleo y 6,3% interanual para el gas natural.

Por REDACCION
  • En agosto de 2024, Argentina registró un superávit energético de US$313 millones.
  • En los primeros 8 meses del año las exportaciones de combustibles y energía tuvieron un crecimiento del 25,5% en comparación con 2023.

En un contexto de incertidumbre económica y fluctuaciones en los mercados globales, Argentina ha logrado destacarse gracias a un sector que ha experimentado un notable renacimiento: la producción de petróleo y gas. Impulsada por el desarrollo de Vaca Muerta, una de las formaciones de hidrocarburos no convencionales más grandes del mundo, la producción energética argentina logró alcanzar su nivel más alto en la última década durante los primeros ocho meses de 2024, consolidando al país como un jugador clave en el ámbito energético regional y global.

Los últimos datos publicados por la Secretaría de Energía revelan que la producción de gas natural ascendió a 34.511 millones de metros cúbicos en lo que va del año, marcando un incremento del 5,9% en comparación con el mismo período de 2023, y un impresionante 25% en relación con los niveles de 2014. Por otro lado, la producción de petróleo alcanzó los 26.337 millones de metros cúbicos, lo que representa un aumento interanual del 9,3%.

El mes de agosto de 2024 fue especialmente significativo, ya que la producción diaria de petróleo alcanzó los 719.300 barriles por día, un crecimiento del 14% con respecto a agosto de 2023. En paralelo, la producción de gas natural se situó en 153 millones de metros cúbicos diarios, lo que también representa un aumento interanual del 6,3%.

Vaca Muerta: el motor alcista de la producción energética

El éxito de Vaca Muerta fue fundamental para este repunte en la industria. La formación ha atraído inversiones nacionales e internacionales, permitiendo un aumento sostenido en la producción a pesar de los desafíos estructurales y económicos que enfrenta el país. Las empresas energéticas que operan en la región, como Vista Energy, YPF y Pampa Energía, han registrado notables subidas en sus acciones, reflejando el optimismo del mercado sobre el futuro de la producción de hidrocarburos en Argentina.

Vista Energy (VIST), por ejemplo, incrementó su valor en un 54% en lo que va de 2024, mientras que YPF experimentó un aumento del 28,56%. Estas cifras son un claro reflejo del creciente interés por las operaciones en Vaca Muerta, que no solo permiten abastecer la demanda local, sino que también posicionan al país como un exportador competitivo en el mercado internacional.

Impacto en la balanza comercial energética

El auge en la producción de hidrocarburos tuvo un impacto directo en la balanza comercial energética del país. En agosto de 2024, Argentina registró un superávit energético de US$313 millones, acumulando US$3.157 millones en los primeros ocho meses del año. Este resultado representa un cambio notable en el balance energético del país, que durante años dependió de costosas importaciones de combustibles para satisfacer la demanda interna.

En este mismo período, las exportaciones de combustibles y energía ascendieron a US$6.407 millones, un crecimiento del 25,5% en comparación con los primeros ocho meses de 2023. En contraste, las importaciones energéticas cayeron un 47,5%, totalizando US$3.250 millones, lo que refleja la creciente autosuficiencia energética de Argentina gracias a la mayor producción interna.

A pesar del éxito de Vaca Muerta y del auge en la producción de hidrocarburos, el sector energético argentino enfrenta importantes desafíos. Los controles cambiarios, la elevada carga impositiva y las fluctuaciones en los precios internacionales del petróleo y gas son factores que podrían ralentizar el crecimiento. No obstante, la resiliencia del sector permite mantener un flujo constante de inversiones que, en el mediano plazo, podrían consolidar a Argentina como un exportador neto de energía.

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