El Fondo Monetario Internacional (FMI) redujo su perspectiva sobre la economía global para el próximo año basándose en los efectos de la guerra en Ucrania, la inflación global que requiere aumentos de las tasas de interés y una desaceleración en China.
«En resumen, lo peor está por venir, y para muchas personas el 2023 será como una recesión«
Pierre-Olivier Gourinchas, jefe economista del FMI
El FMI, que es el principal instituto financiero de las Naciones Unidas, pronostica ahora que el crecimiento global se reducirá el próximo año en un 2,7%, una reducción de 2,9% estimada en julio y de 3,2% de crecimiento proyectado este año. Gourinchas dijo que hay una probabilidad del 25% de que el crecimiento global en 2023 pueda estar en torno al 2%, mientras que hay una probabilidad del 10%/15% de que la producción real de crecimiento pueda ser incluso inferior al 1%.
«2% es un número muy bajo”, dijo Gourinchas. «Solo lo tuvimos cinco veces desde 1970. Y cada vez que lo tuvimos, si lo miras, en 1973 la sacudida del precio del petróleo, en 1981 la desinflación de Volcker, la crisis financiera de 2008. Todos están atascados en nuestra memoria colectiva como momentos de dificultades.»
Más de un tercio de la economía global se espera que contraiga este año o el próximo, mientras que las tres mayores economías, Estados Unidos, la Unión Europea y China, seguirán estancadas. El FMI espera que la economía estadounidense crezca 1,6% este año, 0,7% menos que su pronóstico de julio, y que la economía crezca 1% en 2023. La invasión de Rusia a Ucrania continúa desestabilizando la economía global, según el FMI, lo que lleva a una severa crisis energética en Europa que está aumentando drásticamente los costos de vida y dañando la economía. El FMI advierte que el riesgo de una mala calibración de la política monetaria, fiscal o financiera ha aumentado significativamente y los mercados financieros muestran signos de estrés. El FMI cree que el ajuste excesivo puede empujar la economía global a una recesión innecesariamente dura.
Al mismo tiempo, el FMI señaló que es importante que los países aumenten las tasas e controle la inflación, ya que el aumento temprano de las tasas y un ajuste monetario agresivo son fundamentales para mantener las expectativas de inflación a largo plazo bajo control. En general, el FMI respaldó la estrategia de la Reserva Federal en materia de política monetaria. «Estamos cómodos con la política monetaria que se está viendo en la Reserva Federal y que está incluida en los mercados», dijo Tobias Adrian, director de mercados de capitales e inversiones del FMI. «Creemos que esto es lo que se necesita para bajar la inflación. Para bajar la inflación, se necesita reducir la actividad económica en algún grado. Esperamos que esto sea una caída suave o incluso si fuera una recesión, podría ser una recesión leve«.
El FMI pronostica que la inflación global alcanzará su pico en este año, pero se mantendrá elevada por un período más largo de lo esperado. El FMI ve una inflación de 8,8% este año, seguida de un descenso a 6,5% el próximo año antes de disminuir a 4,1% en 2024. «La inflación continúa subiendo», dijo Gourinchas. «Estamos esperando que alcance su pico pronto y luego empiece a bajar como resultado, en parte, de acciones de bancos centrales. Pero se ha demostrado más persistente, más elevada, y también más amplia». El FMI también advirtió que los riesgos para la estabilidad del sistema financiero global han «empeorado sustancialmente». La organización internacional dijo que la liquidez de los mercados se ha deteriorado en todos los principales activos y que hay un mayor riesgo de una rápida y desordenada revalorización que podría interactuar y ser amplificada por vulnerabilidades preexistentes y la escasa liquidez de los mercados.
El «Global Bank Stress Test» del FMI mostró que un escenario con un endurecimiento abrupto y agudo de las condiciones financieras llevaría a la economía mundial a una recesión en 2023 en medio de una alta inflación. Y mientras el Banco de Inglaterra intervino en el mercado de bonos gubernamentales por segunda vez en 24 horas para reforzar sus mercados de bonos en el contexto de un aumento en los intereses y cambios potenciales en la política fiscal, Adrian dijo que el FMI cree que la situación de Reino Unido es especial para Reino Unido y que no ve el potencial de contagio, ni tampoco la organización internacional ve actividad similar en otros lugares en este momento.
