El peso argentino ha experimentado una caída repentina frente al dólar estadounidense, cayendo a un mínimo de 5 meses en su tipo de cambio “blue”, uno de los muchos tipos de cambio paralelos del país.
Puntos Importantes:
- El peso argentino cae, después de cinco meses, frente al dólar estadounidense.
- El presidente, Alberto Fernández, ignora una decisión del máximo tribunal de justicia.
Los motivos de esta caída, además de la abundancia de pesos por los pagos relacionados con las vacaciones, y la pugna entre el presidente Alberto Fernández y las cortes argentinas. El peso argentino se enfrenta a una caída repentina que ha llevado el valor de la moneda a mínimos históricos. El 23 de diciembre, medios locales informaron que uno de los tipos de cambio informales de la moneda frente al dólar estadounidense, denominado «dólar blue», había alcanzado la marca de los $340 pesos. Esto marca un mínimo de 5 meses después de un período en el que el peso mantuvo su valor relativamente estable. La última vez que el peso se desplomó de esta manera fue en julio, cuando el país también estaba sumergido en un período de inestabilidad política con la renuncia del ministro de Hacienda, Martín Guzmán. El tipo de cambio mínimo histórico es de 350 pesos por dólar estadounidense, alcanzado en junio. Los analistas han propuesto varias explicaciones para esta situación, entre ellas la ocurrencia de las temporadas navideñas cuando hay más pesos en la calle y los argentinos corren a cubrir sus ahorros en moneda extranjera. Sin embargo, otros factores políticos también están presentes en este momento.
Inestabilidad política y financiera
El presidente Alberto Fernández decidió ignorar una decisión del máximo tribunal de justicia del país, que otorgaría un mayor porcentaje a la ciudad de Buenos Aires de los impuestos recaudados a nivel provincial. El tribunal ordenó al Gobierno Nacional entregar el 2,95 % de estos impuestos a la ciudad el 21 de diciembre. Esto ha generado un clima de inseguridad jurídica que, según algunos analistas, está afectando el valor del peso argentino y lo seguirá afectando en el futuro. Esta decisión también genera preocupaciones en otros flancos, explica el ex secretario de Hacienda, Miguel Kiguel. Él afirmó: «Es lógico que surjan interrogantes sobre el cumplimiento de los contratos. Si el Gobierno no acata la sentencia del Tribunal Supremo, se abre el interrogante de qué se cumple y qué no».
Esta batalla afecta la credibilidad y los inversionistas en el país también deben cubrir sus ahorros en dólares estadounidenses, lo que a su vez provoca estas interrupciones repentinas en el tipo de cambio. Venezuela es otro país que también enfrenta severas dificultades con su moneda fiduciaria, que ha alcanzado un tipo de cambio de casi 18 bolívares por dólar estadounidense, uno de los más altos de su historia.
