El presidente de la Reserva Federal de Boston, Susan Collins, dijo el viernes que confía en que los legisladores puedan controlar la inflación sin dañar demasiado el empleo.
«Al subir los tipos de interés, estamos intentando frenar la economía y equilibrar la demanda laboral con la oferta. La intención no es provocar una desaceleración significativa. Pero restaurar la estabilidad de los precios sigue siendo la imperativo actual y está claro que todavía queda mucho por hacer»
Susan Collins, en una conferencia de la Reserva Federal de Boston
Habló mientras la Reserva Federal está inmersa en una agresiva campaña para reducir la inflación incontrolada. Una serie de subidas de tasas ha llevado la tasa de interés de la Reserva Federal para préstamos a un rango del 3,75% al 4%, y prácticamente todos los demás funcionarios de la Reserva Federal han dicho que esperan más aumentos. En sus comentarios, Collins señaló la importancia de reducir la inflación y reconoció que los movimientos de la Reserva Federal podrían tener un precio. Collins es miembro con derecho a voto del comité de operaciones abiertas del mercado federal, que se reúne el próximo 13-14 de diciembre, cuando se espera que aumente en otro medio punto porcentual su tasa de fondos.
«Sigo siendo optimista en cuanto a que existe un camino para reestablecer el equilibrio en el mercado laboral con un aumento moderado en la tasa de desempleo» dijo, añadiendo que cree que «existe un camino para reestablecer la estabilidad de los precios con una desaceleración en el mercado laboral que implique solo un aumento moderado en la tasa de desempleo». Sus comentarios siguen una ráfaga de observaciones similares de sus colegas. El presidente de la Reserva Federal de Saint Louis, James Bullard, causó inquietud en los mercados el jueves cuando dijo que la tasa de fondos podría necesitar subir hasta el 7%. Otros funcionarios también dijeron que ven más subidas y esperan que las tasas permanezcan elevadas.
Proyecciones
Los mercados esperanzaron en un informe la semana pasada que mostró que la tasa de aumentos de la inflación se ha ralentizado. Pero Collins dijo que «los últimos datos no han reducido mi sensación de lo que podría significar una política lo suficientemente restrictiva, ni mi determinación». «Lo suficientemente restrictivo» es un punto de referencia que la Reserva Federal ha establecido para determinar a dónde deben ir las tasas para reducir la inflación. Las actuales proyecciones son del 5%, aunque eso podría cambiar cuando los miembros de la FOMC presenten sus previsiones revisadas para las tasas y la economía en la próxima reunión del mes de diciembre. «En la Reserva Federal estamos comprometidos a que la inflación vuelva al objetivo del 2 por ciento en un tiempo razonable. Solo cuando la inflación es baja y estable puede funcionar bien la economía en general, y el mercado laboral en particular, para todos los estadounidenses», dijo Collins.
