La empresa busca potenciar la actividad en su yacimiento Rincón de Aranda y mantener su producción de gas.
Pampa Energía ha tomado un paso estratégico clave en su plan de expansión en Vaca Muerta al emitir un bono por 83.977.835 dólares con un plazo de cuatro años. Esta colocación de deuda tiene como objetivo principal financiar el desarrollo de su yacimiento de shale oil en Rincón de Aranda, así como mantener y optimizar su actual producción de gas natural.
El bono, emitido bajo la denominación Obligación Negociable Clase 22, ofrece a los inversores una tasa fija anual del 5,75%, y ha sido recibido con gran interés en el mercado, con una sobresuscripción que superó los 93 millones de dólares en órdenes.
Esta inyección de capital permitirá a Pampa Energía avanzar en sus planes de incrementar de manera significativa su producción de crudo, buscando alcanzar los 50.000 barriles diarios para el año 2027, multiplicando por diez sus niveles actuales.
Vaca Muerta: el yacimiento Rincón de Aranda
El yacimiento Rincón de Aranda se encuentra en una etapa clave de desarrollo, y la empresa prevé invertir un total de 1.200 millones de dólares para su expansión. Este esfuerzo es parte de una estrategia integral para consolidar la presencia de Pampa Energía en Vaca Muerta, uno de los reservorios de hidrocarburos no convencionales más importantes del mundo.
Además, la compañía continúa posicionándose como uno de los principales actores en la producción de gas en Argentina. A través de sus yacimientos El Mangrullo y Sierra Chata, Pampa Energía se mantiene entre los líderes de la cuenca neuquina, con un promedio diario de producción de 14,5 millones de metros cúbicos de gas, lo que la convierte en la tercera mayor productora de la región.
Pampa Energía y las energías renovables
Simultáneamente, Pampa Energía ha fortalecido su compromiso con las energías renovables, con la reciente inauguración de su sexto parque eólico, PEPE VI, ubicado en el sudeste de la provincia de Buenos Aires.
Este parque, compuesto por 31 aerogeneradores, tiene una capacidad instalada de 140 MW, suficiente para abastecer a aproximadamente 200.000 hogares. La inversión total para la construcción de PEPE VI ascendió a 260 millones de dólares.
Lo que hace destacar a PEPE VI es su conexión con una línea de 500 kV, lo que lo convierte en el primer parque eólico de Argentina en estar vinculado a una infraestructura de tan alta capacidad. Este logro fue posible gracias a la construcción de una estación transformadora y una línea de transmisión de 8 kilómetros, lo que asegura una conexión eficiente y estable con la red nacional.
Con estos avances en Vaca Muerta y en energías renovables, Pampa Energía continúa consolidándose como un referente en la industria energética argentina, demostrando su capacidad para liderar tanto en el sector de hidrocarburos como en la generación de energía limpia.
