El mercado argentino comenzó el mes con una tendencia compleja.
- El riesgo país bajó 0,5%, situándose en 1.282 puntos básicos.
- Las acciones y los bonos argentinos no escaparon a una tendencia mixta en medio del conflicto bélico.
El mercado financiero argentino comenzó el mes de octubre con movimientos cautelosos, marcado por la incertidumbre tanto en el ámbito local como internacional. Las acciones y bonos argentinos cotizan de manera mixta, reflejando las tensiones políticas internas y el impacto del conflicto en Medio Oriente, que sigue afectando a los mercados emergentes en todo el mundo.
El índice líder de la Bolsa de Buenos Aires, el S&P Merval, se contrajo ligeramente un 0,1%, ubicándose en 1.726.819 unidades, tras haber subido un 1,1% el día anterior. Las acciones de empresas clave mostraron comportamientos dispares. Mientras compañías como Aluar (+1,4%) y Transener (+1,3%) registraron subas, otros papeles como los de Telecom (-1,8%) e IRSA (-1,7%) lideraron las caídas.
En Nueva York, las acciones argentinas tampoco escaparon de esta tendencia mixta. Globant (+0,8%), Loma Negra (+0,8%) y Tenaris (+0,8%) se destacaron en territorio positivo, mientras que empresas como Telecom (-1,7%) e IRSA (-1,5%) continuaron en rojo.
Bonos y riesgo país: la resistencia ante la tormenta
El mercado de bonos, particularmente la deuda soberana argentina en dólares, mostró un comportamiento mixto en medio de este clima de incertidumbre. Los bonos Global 2029 y Bonar 2038 sufrieron bajas de hasta 0,5%, mientras que títulos más largos como el Global 2046 (+0,4%) y Global 2035 (+0,3%) cerraron con ligeras alzas.
El riesgo país, medido por J.P. Morgan, bajó 0,5%, situándose en 1.282 puntos básicos. Este indicador, que refleja la confianza de los inversores internacionales en la capacidad de pago de la deuda argentina, sigue siendo motivo de preocupación, pero en esta jornada mostró signos de estabilidad. Analistas financieros atribuyen este respiro a las políticas fiscales del Gobierno, que lograron mantener bajo control la emisión monetaria y mejorar los superávits, reduciendo así las probabilidades de un nuevo incumplimiento de pagos en el corto plazo.
Impacto de las tensiones en Medio Oriente
La situación geopolítica en Medio Oriente, especialmente el conflicto entre Israel e Irán, agregó una capa adicional de volatilidad a los mercados emergentes. La promesa de represalias por parte de Israel y Estados Unidos, tras el ataque con misiles de Irán, impulsó a los inversores a buscar refugios seguros, desviando capitales hacia activos conservadores, como el oro y los bonos de países más estables.
Sin embargo, los bonos argentinos, en particular los Globales, lograron mostrar una cierta resiliencia dentro del contexto de alta volatilidad internacional. A nivel local, el Gobierno argentino enfrenta desafíos políticos que también impactan en el mercado. La Marcha Federal Universitaria, convocada en rechazo al veto de la ley de Financiamiento Universitario y en reclamo por los salarios de docentes, añade tensión a una coyuntura ya complicada por la cercanía de las elecciones y la incertidumbre sobre el futuro económico del país.
No obstante, los expertos advierten que, aunque el mercado argentino ha mostrado cierta capacidad para resistir las turbulencias, la evolución del conflicto en Medio Oriente y las decisiones políticas internas seguirán siendo factores determinantes en los movimientos de las próximas semanas.