Las autoridades de la administración de Biden están discutiendo si los EE.UU. deberían someter algunas de las empresas de Elon Musk a revisiones de seguridad nacional, incluyendo el acuerdo de Twitter y la red de satélites Starlink de SpaceX.
Puntos importantes
- EE.UU. discute sobre empresas de Elon Musk
- Musk amenaza de dejar de suministrar el servicio de satélites Starlink a Ucrania
- Musk dedicó su tiempo a pensar propuestas para culminar con la guerra
Las acciones de Twitter cayeron hasta un 16% en el pre-market de Nueva York. Los funcionarios estadounidenses se han sentido incómodos con la reciente amenaza de Musk de dejar de suministrar el servicio de satélites Starlink a Ucrania, dijo que le había costado $80 millones de dólares hasta ahora, y lo que ven como una postura cada vez más amigable con Rusia tras una serie de tweets que detallaban propuestas de paz favorables al presidente Vladimir Putin. También están preocupados por sus planes de comprar Twitter con un grupo de inversores extranjeros. Las discusiones aún están en una etapa temprana, según las personas familiarizadas con el asunto, quienes pidieron no ser identificadas. Funcionarios del gobierno de EE.UU. y la comunidad de inteligencia están evaluando qué herramientas, si las hay, estarían disponibles para que el gobierno federal revise las empresas de Musk. «Otra posibilidad es a través de la ley que rige el Comité de Inversión Extranjera en los Estados Unidos para revisar las operaciones y acuerdos de Musk por riesgos de seguridad nacional», dijeron. El panel intermediario, conocido como CFIUS y supervisado por el Departamento del Tesoro, revisa las adquisiciones de empresas estadounidenses por compradores extranjeros. «No está claro si una revisión, que involucraría evaluaciones por parte de los departamentos de Estado, Defensa y Seguridad Nacional, entre otros, ofrecería al gobierno una manera legal de realizar una revisión», dijeron las personas.
Twitter también está confrontando informes de que Musk tiene la intención de despedir a gran parte de su personal como parte de su toma de control. The Washington Post informó que el plan de Musk para Twitter incluye el despido de 75% de su personal en un periodo de meses. Bloomberg News confirmó que los posibles inversores fueron informados de los planes de recortes, junto con un esfuerzo para duplicar los ingresos en tres años. Uno de los elementos de la transacción de $44.000 millones de dólares de Twitter que podría activar una revisión de CFIUS es la presencia de inversores extranjeros en el consorcio de Musk. El grupo incluye al príncipe Alwaleed bin Talal de Arabia Saudí, Binance Holdings Ltd., una casa de cambio de activos digitales fundada y dirigida por un chino nacido en el continente, y el fondo soberano de Qatar. El panel opera a puertas cerradas y rara vez confirma cuando está realizando revisiones. CFIUS también tiene el poder de revisar transacciones que ya se han consumado. Un portavoz del Departamento de Tesoro de EE.UU. dijo que el CFIUS no comenta públicamente sobre ningún tipo de transacciones que pudieran estar bajo revisión. Un portavoz del Consejo de Seguridad Nacional dijo que no podían hablar por el CFIUS. En cuanto a la Casa Blanca, «no sabemos de ninguna discusión de este tipo», dijo la portavoz Adrienne Watson.
Propuestas para terminar la guerra Rusia-Ucrania
El multimillonario Musk se ha dedicado en las últimas semanas a anunciar propuestas para poner fin a la guerra rusa y amenazar con cortar el apoyo financiero a Starlink, una red de internet en Ucrania. Sus tuits y comentarios públicos han frustrado a funcionarios de EE.UU. y Europa y han recibido elogios de rivales de América. Luego se retractó de su amenaza de detener el despliegue de Starlink y dijo que continuaría pagando los costos de este servicio. Starlink se ha convertido en una herramienta esencial para las comunicaciones en Ucrania durante la invasión rusa. Musk está proveyendo el servicio gratuitamente, pero dice que SpaceX pierde $20 millones al mes proveyéndolo a Ucrania y que no puede responsabilizarse por esos costos indefinidamente. El gobierno de Estados Unidos también usaría Starlink en caso de un apagón en las telecomunicaciones, según personas familiarizadas con el asunto. Musk forzó su camino en el negocio de lanzamientos de satélites militares e inteligentes después de presionar vigorosamente en el Congreso y demandar a la Fuerza Aérea de EE.UU. para tener el derecho a competir con una alianza establecida de gigantes de la defensa Boeing Co. y Lockheed Martin Corp.
En 2019, el Pentágono dijo que estaba revisando la credencial federal de seguridad de Musk después de que él fumara marihuana en un podcast, aunque los resultados de esa investigación son inciertos. Un funcionario de SpaceX en ese entonces, que pidió no ser identificado, dijo que la revisión no había tenido un impacto en la compañía. SpaceX vuela astronautas a la Estación Espacial Internacional en virtud de una larga alianza con NASA y lanza satélites secretos para el Pentágono. La Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional, o USAID, también ha pagado por algunos de los satélites de SpaceX Starlink que han llegado a Ucrania.
