La desaceleración de los alimentos y los precios regulados son factores clave para esta perspectiva.
Por REDACCION
- JPMorgan está pendiente de la evolución de los precios regulados y del impacto de la política monetaria del Banco Central.
- Si el gobierno logra mantener esta tendencia podría abrirse la puerta a una estabilidad económica más sostenible.
JPMorgan ajustó a la baja su pronóstico de inflación para lo que resta del 2024 y el 2025, tras los datos que arrojó el INDEC esta semana, que apunta a una moderación en los precios. El Índice de Precios al Consumidor (IPC) en Argentina mostró en octubre una suba mensual de 2,7%, cifra que sorprendió positivamente a los mercados y llevó a la firma a corregir a la baja sus estimaciones de inflación para el país.
Según el banco de inversión estadounidense, la inflación interanual de diciembre de este año cerrará en un 120%, una revisión considerable respecto a sus proyecciones anteriores. Para el 2025, proyecta un descenso gradual, con una inflación interanual del 25% hacia fin de año.
Revisión de proyecciones y expectativas de JPMorgan
En su último informe, JPMorgan detalló que para el primer trimestre de 2025 espera una inflación mensual promedio del 2,5%, una rebaja significativa comparada con su pronóstico anterior de 3,8%. Esta revisión, indicaron los analistas, responde a la desaceleración de precios observada en el país y a los comentarios de Javier Milei sobre la política de devaluación del tipo de cambio. El presidente sugirió que, de sostenerse una inflación mensual del 1%, se reducirá el «crawling peg» al 1% mensual, lo cual disminuiría las expectativas de devaluación y, en consecuencia, el impacto inflacionario.
Esta revisión coloca a JPMorgan en línea con las estimaciones del Banco Central, cuya última encuesta del Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM) ubica la inflación interanual del 2024 en el 120%, con un pronóstico mensual de 3% para enero y del 2,8% para febrero y marzo de 2025.
Factores clave en la desaceleración inflacionaria
El informe de JPMorgan destaca que la reducción en el índice de inflación en octubre, el registro más bajo desde noviembre de 2021, se debió principalmente a una moderación en el precio de los alimentos y los bienes regulados. En el rubro de alimentos, fueron los productos frescos (carnes, frutas y verduras) los que contribuyeron a la baja, con un impacto “nulo” en el aumento de precios mensual.
Los precios regulados también ayudaron a este comportamiento, pese a los ajustes en tarifas de servicios energéticos (+3,2% mensual) y medicina prepaga (+6%). Según el banco, la reducción en el precio de los combustibles fue un factor determinante en esta desaceleración, ayudando a mitigar el impacto de los aumentos en otros sectores.
Proyecciones para el resto del año y 2025
JPMorgan y otros analistas del mercado están pendientes de la evolución de los precios regulados y del impacto de la política monetaria del Banco Central en los próximos meses. Con una inflación interanual proyectada en 120% para diciembre, los economistas anticipan un leve repunte en los precios regulados, aunque el reciente dato de octubre podría suavizar el impacto de cara a enero.
Para el 2025, el banco prevé una trayectoria inflacionaria más moderada. Con una posible reducción en la tasa de devaluación mensual, se espera que la inflación se estabilice en torno al 2,5% mensual durante los primeros trimestres. Hacia finales de 2025, JPMorgan proyecta una tasa interanual del 25%, un pronóstico alentador para la economía argentina, que durante años ha soportado niveles de inflación significativamente altos.
